La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, destacó que la Ley Build Back Better reducirá el precio de etiqueta de los vehículos eléctricos nuevos fabricados en Estados Unidos por trabajadores sindicalizados hasta en doce mil 500 dólares.
Con ello, la administración del presidente Joe Biden, desafió la serie de ultimátums que han enviado México, Canadá y la Unión Europea, en los que advierten que Estados Unidos violaría las reglas de la Organización Mundial de Comercio (OMC) y otros acuerdos comerciales si se aprueban subsidios automotrices.
La promoción de la iniciativa se da en vías de votarse en el Congreso estadounidense.
“Nos preocupa profundamente que determinadas disposiciones de los créditos fiscales para vehículos eléctricos propuestas en la Ley Reconstruir Mejor (Build Back Better Act) violen las obligaciones de los Estados Unidos en virtud de T-MEC”, dijeron Chrystia Freeland, viceprimera Ministra y Ministra de Finanzas, y Mary Ng, ministra de Comercio Internacional, Promoción de Exportaciones, Pequeñas Empresas y Desarrollo Económico de Canadá.
Cabe señalar que el subsidio va desde siete mil 500 hasta doce mil 500 dólares y sería mayor si se cumplen las condiciones de ensamblaje en ese país, con un cierto porcentaje de componentes estadounidenses y mano de obra sindicalizada.
La propuesta equivale a un arancel de 34 por ciento sobre los vehículos eléctricos ensamblados en Canadá.
"'La propuesta representa una amenaza significativa para la industria automotriz canadiense y es una derogación de facto del T-MEC”, aseveraron Freeland y Ng, en una carta dirigida al Congreso de Estados Unidos.