Estados Unidos exportará este año más maíz al resto del mundo para suplir la carencia de este cereal a nivel global ante el conflicto armado entre Rusia y Ucrania, en contrarse venderá menos trigo para poder hacer frente a la demanda interna.
Ucrania es el cuarto mayor exportador mundial de maíz, solo por detrás de Estados Unidos, Argentina y Brasil, por lo que la guerra supone un reajuste gigantesco en este mercado al quedar prácticamente paralizado uno de sus mayores actores a nivel mundial.
Para compensar la caída de las exportaciones ucranianas, el Departamento de Agricultura estadounidense prevé que los productores nacionales aumenten sus ventas al exterior en más de dos mil millones de kilogramos respecto a su pronóstico anterior, hasta un total de 67 mil 500 millones para la temporada 2021/2022.
En su última actualización del informe Estimaciones de Oferta y Demanda Agrícolas, el Departamento de Agricultura del Gobierno estadounidense tomó en cuenta la incertidumbre causada en los mercados de cereales mundiales por la invasión rusa de Ucrania, y modificó sus proyecciones.
El informe también proyecta que el maíz proveniente de la India y de la propia Rusia también contribuya a paliar la escasez ucraniana.
En lo relativo al trigo, la previsión es que la guerra en Ucrania no solo no aumente las exportaciones de Estados Unidos sino que las reduzca, ya que la gran mayoría del trigo que se cultiva en el país ya se ha vendido en el mercado de futuros y, además, habrá que compensar una caída de las importaciones.
En concreto, el Departamento de Agricultura espera que EE.UU. importe 135 millones de kilogramos menos de trigo, y que a su vez reduzca las ventas al exterior en 270 millones.
Estados Unidos produce el once por ciento del trigo mundial y el 33 por ciento del maíz.