La Coparmex consideró una regresión a los años setenta hacia un modelo político hegemónico la asignación de diputaciones de representación proporcional por parte del Consejo General del INE.

La votación dividida que se registró en el Instituto Nacional Electoral (INE) para asignar las diputaciones de representación proporcional, es una muestra clara de que existen argumentos para hacer una lectura integral de la Constitución para respetar la voluntad del electorado y abre un debate importante sobre la interpretación de la Carta Magna en torno a la sobre representación, señaló el Sindicato Patronal.

Esta elección se llevó a cabo durante la sesión del Consejo General del INE, en la que avaló con 7 votos a favor y 4 en contra, la mayoría calificada de Morena, PVEM y PT en la Cámara de Diputados. Con este aval, Morena y sus partidos aliados tendrán mayoría calificada de 364 diputados en San Lázaro.

La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) instó a que la voluntad ciudadana se viera reflejada de manera fiel en la integración del Congreso, respetando los porcentajes de representación proporcional y garantizando el cumplimiento del artículo 54 de la Constitución.

Consideró que es necesario equiparar la figura de partido con la de coalición, como se hace en otras interpretaciones de la norma constitucional, para que ninguna fuerza política tuviera más de 300 curules ni más del 8% de representación. 

Subrayó la importancia de que cualquier cambio constitucional sea producto del consenso de todas las fuerzas políticas y no de una mayoría abrumadora.

"El espíritu de las reformas que ha tenido el artículo 54 de la Constitución siempre ha sido progresivo, orientado a fortalecer la democracia mediante un marco que refleje de manera justa y equilibrada la diversidad política del país".

En este sentido, insistió que "es crucial el derecho a promover acciones de inconstitucionalidad, garantizando que una oposición que alcance el 33% pueda presentar dichas acciones, evitando un retroceso hacia un modelo político hegemónico, como el vivido en México en los años 70".

Ahora, corresponde al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), refirió, el continuar esta reflexión y asumir con carácter su responsabilidad histórica. Es imperativo que los magistrados y magistradas no se limiten a la mera aplicación de una fórmula, sino que consideren todas las alternativas viables para tomar la mejor decisión en beneficio de la democracia en México.

Puntualizó que este análisis debe ir más allá de lo técnico y adentrarse en los aspectos jurídicos, políticos y éticos que aseguren una interpretación justa del marco constitucional.

Confió que en el TEPJF se tomará una decisión que garantice la representación equitativa de todas las opciones políticas y, por ende, la confianza en nuestras instituciones.

Exhortó al TEPJF a que en su determinación, se respete la voluntad ciudadana expresada en las urnas y se asegure que cualquier sobre representación no distorsione el equilibrio democrático que tanto esfuerzo ha costado construir en nuestro país.

Concluyó que solo "a través del respeto a la voluntad popular y la pluralidad podremos continuar avanzando hacia un México más justo y democrático".