Fitch Ratings elevó la calificación nacional de largo plazo del estado de Puebla a ‘AA+(mex)’ desde ‘AA(mex)’, con perspectiva crediticia estable, aunado a que la entidad no tiene planes para disponer de endeudamiento adicional.

El alza en la calificación refleja un balance operativo favorable en el período de análisis, producto del buen dinamismo de los ingresos operativos (IO) y un control del gasto eficiente, explicó la agencia calificadora

Lo anterior, aunado a niveles mayores de liquidez y al fortalecimiento de la cobertura real del servicio de la deuda (CRSD).

La calificación refleja un perfil de riesgo de ‘Rango Medio Bajo’ y una evaluación de sostenibilidad de la deuda de ‘aa’, de acuerdo a lo proyectado.

A nivel nacional, Puebla tiene relevancia en términos poblacionales y económicos; no obstante, el estado enfrenta limitaciones debido a sus condiciones socioeconómicas ya que presenta un grado de marginación clasificado como “alto”.

En la calificación comenta que al cierre de 2023, los ingresos propios del estado de Puebla crecieron 11.7% respecto a 2022, impulsados por el dinamismo en la actividad económica, una eficiencia recaudatoria mayor y diversos estímulos fiscales.

En particular, destaca el incremento de 11.0% en la recaudación del impuesto sobre nóminas (ISN), que ascendió a cuatro mil 544 millones de pesos.

Así, a junio de 2024, los ingresos locales aumentaron 10.9% respecto al mismo período del ejercicio anterior, destacando el dinamismo de los impuestos.

Puebla mantiene políticas presupuestarias prudentes, un Balance Operativo favorable y un nivel de caja alto para cubrir sus gastos.

Durante el período de análisis, el dinamismo del gasto operativo (GO) ha sido cercano al desempeño del Ingreso Operativo, con una tasa media anual de crecimiento real del gasto operativo de 1.1%, mientras que la del ingreso de 0.8 por ciento.

Añadió que el crecimiento del gasto en 2023 se explica, entre otros factores, por ajustes salariales y en prestaciones, pago de créditos fiscales e incremento en transferencias a entidades, salud, educación y pensiones.

En 2023, la deuda ajustada totalizó 10 mil 493 millones de pesos, saldo que incorpora deuda directa por cuatro mil 337 millones proveniente de créditos bancarios a largo plazo, así como obligaciones financieras contraídas a través de bonos cupón cero (BCC) con un valor residual de 604 millones de pesos.

El monto restante corresponde a otras deudas clasificadas por Fitch, relacionadas con tres proyectos de asociación público privada (APP) y deuda indirecta contingente del Sistema Operador de Agua Potable y Alcantarillado de Puebla (SOAPAP).