El senador izquierdista Bernie Sanders dejó el camino libre al exvicepresidente Joe Biden rumbo a la carrera presidencial por Estados Unidos.
El senador izquierdista había logrado crear un movimiento de cientos de miles de personas, especialmente jóvenes, pero a la hora de la verdad se encontró con un techo del 30 por ciento de los votos que no pudo superar.
El número de militantes demócratas moderados superaba ampliamente a sus apoyos, y cuando los rivales de Biden se marcharon y el 'número dos' de Barack Obama quedó como el líder único del sector centrista, dejaron sin camino ya a Sanders.
"Hoy estoy suspendiendo mi campaña. Pero aunque termina la campaña, la lucha por la justicia continúa", dijo el senador, en un mensaje en su cuenta en Twitter.
Sanders pone así fin a su segundo intento por alzarse con la investidura presidencial demócrata, tras ser derrotado en 2016 por Hillary Clinton.