La zona metropolitana Puebla-Tlaxcala se ubicó en el sitio 15 de las ciudades con más de un millón de habitantes, conforme el Índice de Competitividad Urbana del IMCO, con base en 66 ciudades evaluadas, que en este año hizo énfasis en el hecho de que para que las personas encuentren más y mejores oportunidades, necesitan ciudades seguras, innovadoras y conectadas.

Entre las 66 ciudades, solo tres zonas urbanas destinan más del 10% de los fondos federales para movilidad a la inversión en transporte público: Puebla-Tlaxcala, Guadalajara, la Ciudad de México y la zona metropolitana (59 municipios del Estado de México y uno de Hidalgo).

En la presentación del índice de competitividad urbana que desarrolla el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), su presidente, Valentín Diez Morodo, sostuvo que continuarán contribuyendo al debate nacional, ante la actual coyuntura económica, política y social.

Mientras, la directora del IMCO, Valeria Moy, destacó que 8 de cada 10 habitantes del país habitan en ciudades, al detallar que en las ciudades con más de un millón de habitantes solamente Monterrey goza de una competitividad muy alta, siendo en la práctica la única del país con ese nivel.

En el opuesto, Tijuana, Puebla-Tlaxcala, Toluca y Cuernavaca reportan una competitividad media baja.

Refrendó que las ciudades tienen que ser seguras, pues, para que los habitantes puedan interactuar y decidir con libertad, su seguridad física y jurídica son cruciales.

En promedio, las ciudades redujeron la tasa de homicidios y secuestros, aunque aumentó la incidencia delictiva.

Las ciudades más seguras son Mérida, Saltillo y La Laguna, mientras que las menos seguras son Tijuana, Juárez y Cuernavaca.

En torno a ciudades innovadoras, en pro de la creatividad y la generación de ideas que impulsan el desarrollo y crecimiento personal y social, el estudio evidencia que disminuyó la cantidad de posgrados de calidad y centros de investigación presentes en las ciudades por cada cien mil personas económicamente activas. Lo mismo pasó con la cantidad de patentes solicitadas. 

Mientras, como ciudades conectadas, subrayó que la colaboración es una clave para la prosperidad compartida, por lo que tejer redes físicas que la faciliten es un elemento importante para mejorar la competitividad.