Para cumplir con los objetivos primordiales de una política fiscal enfocada en el crecimiento y desarrollo económico sostenible, se requiere llevar a cabo una reforma hacendaria a través de diversas acciones que incluyen el empadronamiento de la economía informal; así como la estructuración de un federalismo fiscal que incentive a los estados y municipios a obtener ingresos propios, postuló el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) en su plataforma Visión 2024-2030.

Asimismo, recalcó, es necesaria una simplificación administrativa en materia tributaria para hacer que el cumplimiento de las obligaciones fiscales sea más fácil y accesible para los contribuyentes, lo que a su vez puede aumentar el cumplimiento voluntario, y reducir la evasión fiscal.

Todo esto en un marco de transparencia en el ejercicio del gasto público, así como de seguridad y certeza jurídica, planteó la presidenta del comité técnico nacional de estudios fiscales del IMEF, Teresa Rodríguez Bastidas.

Sí, se trata de recaudar más, pero también y muy importante, de gastar de mejor forma, acotó.

Destacó que los objetivos son recaudar de la economía privada (por medios equitativos) ingresos para hacer frente a sus necesidades de gasto; estabilizar la economía para crear condiciones necesarias para el desarrollo económico; así como redistribuir el ingreso, por lo que se requiere de una reforma hacendaria que logre un equilibrio mayor entre las facultades de las autoridades, los derechos de los contribuyentes y se incentive el cumplimiento fiscal de toda la población.

La propuesta de IMEF considera deducciones autorizadas y personales, seguridad y certeza jurídica para los causantes, luego que, la seguridad jurídica constituye uno de los pilares sobre los que descansa el sistema fiscal mexicano, mismo que implica que el contribuyente no se encuentre en una situación de incertidumbre jurídica y, por ende, en estado de indefensión.

Asimismo la creación de un sistema nacional de empadronamiento de la economía informal, con el fin de ampliar la base tributaria mexicana es indispensable, luego que es una auténtica realidad mexicana presente en diversos locales e industrias. 

El IMEF plantea modificar el esquema de coordinación fiscal y trabajar en un efectivo federalismo fiscal, pues, el sistema actual de coordinación ha derivado en una gran dependencia por parte de los estados y municipios en las participaciones federales. 

Concluye que que se requieran acciones que no sólo se apliquen para dar respuesta a una coyuntura de recaudación para un fin especifico, sino que sean medidas de fondo
con alcance de largo plazo para contar con una estructura eficiente.

Además, es imperante que el Gobierno realice inversiones estructurales eficientes, de la mano de la inversión privada que promuevan el crecimiento económico, obligándose a transparentar el ejercicio del gasto público en beneficio de toda la población mexicana.

Sí, se trata de recaudar más, pero también, y muy importante, de gastar de mejor forma, concluyó.