El Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC) no implica que el salario de la industria automotriz mexicana se fije en 16 dólares, sino que 40% de los contenidos regionales se hayan ensamblado con remuneraciones de ese nivel en cualquiera de los tres países del área.

El director general para América del Norte de la Secretaría de Economía (SE), Salvador Behar Lavalle, estimó también que se detonarán compras intra-regionales, lo que mantiene la competitividad de los tres países en función del nuevo acuerdo comercial.

Entrevistado en el marco de su encuentro con el Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (Comce Sur), refrendó que México mantendrá su competitividad y más importaciones en producción y exportaciones automotrices, con el séptimo y tercer lugar en vehículos ligeros, respectivamente.

Indicó que empresas como Audi México o Volkswagen van a poder traer más empresas de suministros, producir más en la región y de ahí seguir siendo competitivos.

Recalcó que T-MEX moderniza y actualiza en forma permanente el acuerdo original plasmado en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), reconoce la tecnología del siglo XXI e incluye temas como pymes, anti corrupción y el e-commerce.

Ahora, añadió, la transición debe usarse para mejorar las condiciones de competitividad y no deteriorar el intercambio comercial en el área que se mantiene como la más importante a nivel mundial.

El director general para América del Norte de la Secretaría de Economía (SE), estimó se detonarán compras intra-regionales, lo que mantiene la competitividad de los tres países en función del nuevo acuerdo comercial, aunque este entraría en la práctica en vigor hasta 2020.

Confió en que no se modificarán los términos de la negociación del T-MEC y que la nueva administración haga lo propio para la ratificación del nuevo acuerdo que se pactó, al sensibilizar al Senado de la república sobre los alcances logrados.

Más allá de esto, apuntó que ninguno de los sectores se deben de ver afectados por la transición de TLCAN al T-MEC y a las nuevas reglas que establece en sectores como el automotriz, autopartes, pues, “este acuerdo fue de ganar ganar”.

En torno a la producción de vehículos ligeros recordó que la obligación que hay es que 40 por ciento del automotor se haya elaborado con un sueldo de 16 dólares por hora, o sea, que no necesariamente se haya ensamblado en México, pero si en los países que forman en T-MEC.

En el porcentaje del 40 por ciento se incluye investigación y desarrollo de los prototipos, marketing y el transporte de los vehículos ligeros, mientras que el restante 60 por ciento no tiene esa condición laboral, es decir, puede considerar salarios inferiores como los que hay actualmente en la industria automotriz mexicana.

Behar Lavalle recalcó que no se negociaron salarios en México a través del T-MEC.

Consideró que el TMEC se deje como está negociado y que se ponga en práctica en 2020 tras su aprobación en 2019, luego de hacer las acciones necesarias para su puesta en marcha, a la espera de los momentos políticos para incorporar los temas en las agendas de los legislativos de Estados Unidos, el Gabinete y su Parlamento en Canadá y el Senado Mexicano.

El hecho es que el tratado original de 1994 tiene que seguir vigente mientras no entre en vigor T-MEC, refirió.

Insistió que México no es el perdedor del nuevo Tratado, pues cuenta con una red de 46 socios comerciales que no tienen porqué verse afectados, sino, más bien, aprovechar las ventajas de una plataforma de exportaciones donde nuestro país representa el centro para exportar hacia Asia, Europa, América Latina y la región de la Alianza del Pacífico, así como América del Norte.