La suma de paros técnicos completos o parciales en las plantas automotrices instaladas en México suman 439 días en nueve firmas, siendo julio el mes con mayor impacto, tanto por escasez de semiconductores como de petroquímicos, conforme análisis del Banco de México (Banxico).

En su análisis “estimación del impacto de las disrupciones en el suministro de insumos sobre la producción automotriz y la actividad económica”, ubica contracciones anuales del 10 al 17.18 por ciento en producción de vehículos ligeros por el desabasto de semiconductores.

Con ello la estimación de pérdida en el PIB de México por el desabasto de semiconductores alcanzó de enero a julio el -0.58 por ciento, mientras que, en equipo de transporte una contracción de -6.38 por ciento.

En tanto, la caída del PIB en 2021 sería del -0.71 a -0.99 por ciento del PIB, con bajas en el sector de fabricación de equipo de transporte de -7.79 en el escenario 1, del -9-1 por ciento en el escenario 2 y hasta del -10.94 por ciento en el escenario 3.

El análisis de Banxico señala que la escasez de semiconductores y las disrupciones generadas en la producción del rubro de equipo de transporte ya impacto negativamente la recuperación de las manufacturas y el PIB de México.

Refiere que se espera que la distribución de estos insumos mejore, pero en forma gradual, con lo que las afectaciones al PIB podrán extenderse.

Asimismo, en sus consideraciones finales refiere que tampoco se puede excluir un escenario que mantenga la afectación registrada ante el alza de casos de COVID-19 a nivel global, y particularmente en Asia, región que concentra la producción de semiconductores.

De acuerdo a la Industria Nacional de Autopartes, por lo menos 64 modelos de vehículos se han visto afectados por desabastos de semiconductores.

Las afectaciones alcanzaron a firmas como Stellantis-FCA y Audi México en enero, mientras que en febrero se extendieron a General Motors y Volkswagen, en marzo a Honda, Toyota y Nissan, así como a Honda, Mazda y Ford en meses subsecuentes.